El Tribunal Constitucional ha otorgado su amparo a dos hermanos que habían sido condenados por la Audiencia de Guipúzcoa a un año y tres meses de prisión cada uno por agredir a un agente de la Policía Municipal de San Sebastián, y ha reconocido "su derecho a un proceso con todas las garantías y a la presunción de inocencia".
Los hechos ocurrieron el 6 de mayo de 1999, cuando ambos jóvenes discutieron con un agente de la Guardia Urbana. La disputa derivó en pelea y el policía y uno de los hermanos sufrieron lesiones de distinta consideración. Un juzgado donostiarra absolvió en primera instancia a ambos hermanos del delito de atentado contra agente de la autoridad y de las faltas de lesiones y daños de los que eran acusados.
La Fiscalía recurrió esta sentencia ante la Sección Segunda de la Audiencia de Guipúzcoa, que revocó la decisión del Juzgado de lo Penal y condenó a cada uno de los jóvenes a un año y tres meses de cárcel por un delito de atentado y a pagar 72 euros por las faltas de daños y lesiones.
La defensa de los acusados solicitó el amparo del Constitucional, cuya sentencia considera que se han vulnerado los derechos de los acusados "a un proceso con todas las garantías" y su presunción de inocencia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 21 de mayo de 2005