El Ayuntamiento de La Nucia (Marina Baixa), gobernado por el PP con mayoría absoluta, ha aprobado inicialmente dos Programas de Actuación Integrada (PAI) que en total ocuparán casi 5 millones de metros cuadrados, superficie similar a la actualmente edificada. La reclasificación de los terrenos, en plena huerta tradicional, fue incluida en una propuesta de homologación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), promovida por el Ayuntamiento, entonces presidido por el ex consejero de Industria, Diego Such. La Consejería de Territorio y Vivienda rechazó en diciembre de 2003 la iniciativa por considerar que dado el volumen del terreno reclasificado debería ser objeto de una revisión global del PGOU.
Uno de los proyectos, en plena huerta tradicional, afecta a un acueducto del siglo XVII
El Ayuntamiento aparcó la revisión del planeamiento y ha dado luz verde inicialmente a dos propuestas para levantar sendas urbanizaciones en la partida de la Serreta y la zona conocida como Pie de Monte. Ambos PAI están pendientes del visto bueno final de la Consejería de Territorio y Vivienda. "No hay nada decidido. Se estudiarán con detenimiento antes de emitir una resolución, favorable o contraria, dado que ya se denegó la reclasificación de los terrenos", han señalado fuentes del departamento que dirige Rafael Blasco.
En el caso concreto del PAI del sector de la Serreta los propietarios de los terrenos denuncian que la tramitación del programa acumula una serie de supuestas irregularidades. El proyecto, aprobado inicialmente por la corporación el 18 de junio de 2004, ocupa 2,7 millones de metros cuadrados y prevé levantar 3.594 viviendas y su correspondiente campo de golf. El promotor es el constructor Andrés Ballester, a través de la mercantil Les Cases del Pinar, SL.
Los pequeños propietarios del terreno se oponen a la futura urbanización por el negativo impacto en esa zona de huerta tradicional del término de La Nucia y los sobrecostes en otros aspectos básicos con el de los recursos hídricos. Además, sostienen que el Ayuntamiento aprobó el PAI con el PGOU en fase de tramitación. Los afectados resaltan otra negativa consecuencia de la futura urbanización: la afección a la Séquia Mare, canalización del siglo XVII, de ocho kilómetros de recorrido que, a juicio de los propietarios, se debería proteger como monumento histórico e hidráulico. Los dueños del suelo exigen a Territorio y Vivienda que tenga presente todas esas consideraciones antes de autorizar el proyecto.
El alcalde de La Nucia, Bernabé Cano, rechaza las críticas de los propietarios y asegura que la aprobación inicial del PAI se ajusta a la legalidad y también que el proyecto garantiza la protección de la Séquia Mare.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 25 de mayo de 2005