Veinticinco años se dice pronto y son los que llevo viviendo en Barcelona, aunque nací en Argentina. Y 24 años, también muchos, los que llevo escuchando por la radio El Ricky y el Bernal. Con ellos he aprendido catalán, me he enterado de las noticias del día y, sobre todo, me he reído aun en aquellos días nebulosos que a veces se nos presentan. El pasado domingo, Pere Bernal nos dejó, y cuando me enteré de la noticia me quedé sentada y tan angustiada como si se me hubiera ido un familiar, porque eso es lo que son para nosotros, sus oyentes asiduos, estos dos grandes profesionales de la radio.
Nuestras condolencias a su familia y a su compañero Ricky Romero. Pere, allí donde estés con tu humor seguramente también tendrás seguidores. Nosotros aquí te añoraremos. T'estimo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 27 de mayo de 2005