El cardenal de Madrid, Antonio María Rouco, aludió ayer a los "errores del mundo globalizado", durante la celebración del Corpus Christi en la catedral de Madrid. "El panorama de pobreza y miseria material y espiritual en la mayor parte de la geografía se entrecruza con el escenario de los países más desarrollados de Europa y América, incluida España, donde se ponen en cuestión derechos fundamentales de la persona, cuando no su propia dignidad y las de sus instituciones básicas, el matrimonio y la familia", dijo el prelado.
Rouco añadió que "perdiendo a Dios, se pierde al hombre, se le convierte en muñeco del poder, se le explota y se degrada al máximo, hasta su eliminación física si conviene".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 30 de mayo de 2005