La Junta Central de Usuarios del Vinalopó y L'Alacantí cifró ayer en 178 hectómetros cúbicos anuales el déficit de los acuíferos de estas comarcas. A juicio de esta entidad, la sobreexplotación de los acuíferos es el mayor problema ambiental del territorio valenciano. La junta insistió ayer en que acusaciones como que el trasvase del Júcar va a dejar sin agua al río son "argumentos falsos y demagógicos que tergiversan la realidad".
La junta puso como ejemplos de la sobreexplotación de acuíferos el de la sierra de Crevillent, cuyos sondeos de extracción de agua alcanzan los 600 metros de profundidad, y el Carche-Salinas, cuyo nivel de agua desciende diez metros al año. A esta problemática se suma el hecho de que la mitad de la población de la provincia de Alicante se abastece de los acuíferos del Vinalopó, según datos aportados por la Junta Central de Usuarios, integrada por 21 Ayuntamientos, 47 entidades de regadío y 19 empresas y entidades de consumidores.
Esta entidad debe atender el abastecimiento a una población estable de un millón de habitantes, además del millón y medio de población estacional, y hacer frente al suministro de agua para riego de unas 50.000 hectáreas de superficie. Ante esta situación, la entidad, que agrupa también al Consorcio de Aguas de la Marina Baja, volvió ayer a defender el trasvase Júcar-Vinalopó como infraestructura hídrica que "permita la regeneración de acuíferos y avale el desarrollo económico y social de la provincia de Alicante".
Según la junta, una vez asegurados los recursos que garanticen los derechos de los usuarios del río Júcar y el aporte de agua a L'Albufera de Valencia, esta actuación permitiría "trasvasar hasta 80 hectómetros cúbicos anuales a la red hídrica del Vinalopó, la Marina Baixa y L'Alacantí", aseguró el presidente de la Junta Central de Usuarios, Andrés Martínez.
De acuerdo con un comunicado aprobado ayer por la Junta de Usuarios, "existe un evidente intento, utilizando argumentos falsos y demagógicos, de tergiversar y manipular la realidad de las cosas", con acusaciones como que "el trasvase va a dejar sin agua al río Júcar" o que "se condena a muerte al río". "Frente a estas falsedades, reiteramos que el trasvase está planteado desde sobrantes del río Júcar, y no afectará a los derechos de sus regantes, ni a los caudales ecológicos ni a las aportaciones para L'Albufera", agregó Martínez. Expuso que esta entidad no descarta la convocatoria de movilizaciones, incluida una manifestación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 1 de junio de 2005