El doctor Sachs en su artículo publicado en su periódico el 2 de junio, resume muy bien la necesidad urgente de reducir las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera y la creciente tendencia de la industria privada y administraciones locales estadounidenses de hacer oídos sordos a la política de avestruz que en este terreno lleva la Administración Bush.
Sin embargo, se centra en soluciones tecnológicas como la energía nuclear y secuestro del carbono para reducir las emisiones y se olvida de medidas para el ahorro de energía -mejores aislamientos, impuesto sobre el combustible de la aviación, procesos industriales más eficientes, etcétera- que casi siempre cuestan menos y son más eficaces que las anteriores. Además, todos los occidentales tenemos que reconocer la necesidad imperiosa de reducir nuestro gasto energético para permitir un incremento gradual del nivel de vida del tercer mundo sin un aumento imparable mundial de las emisiones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 4 de junio de 2005