El Consejo de Europa ha concedido una mención de honor a los hitos que constituyen la Ruta de Hierro de los Pirineos, entre los que se encuentran la ferrería de El Pobal, en Muskiz, el Puente Colgante, que une Portugalete y Las Arenas, el museo Chillida-Leku y la ferrería de Agorregi. La Ruta del Hierro de los Pirineos es un proyecto en el que están trabajando instituciones del País Vasco, Andorra, Aquitania, Languedoc-Rousillon y Cataluña para construir un itinerario cultural transfronterizo que una las huellas de la actividad siderúrgica.
El programa sigue las directrices marcadas por el Instituto Europeo de Itinerarios Culturales que los entiende como un vehículo de conexión de territorios vecinos a partir de un determinado tema cultural. En el caso de estas cinco regiones pirenaicas el asunto elegido es la gestión de la producción del hierro y sus productos.
La iniciativa pretende promover la restauración y el estudio del patrimonio siderúrgico. La conservación de minas, carboneras, ferrerías, poblados mineros y hornos, entre otras instalaciones, permitirá divulgar una de las actividades económicas más pujantes de los Pirineos entre los siglos XVII y XIX e incluir el itinerario en los circuitos de turismo cultural. La mención de honor destaca la calidad de todos los elementos de la Ruta del Hierro de los Pirineos, en la que también están incluidas las ferrerías de Ripoll, sitas en Cataluña, y Rosell, en Andorra.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 7 de junio de 2005