He leído con atención el artículo de Marisa Soleto que habla ampliamente de la custodia compartida, y sigo sin entender tres cosas: ¿por qué lo que es progresista en Francia y Suecia, no lo es en España? ¿Por qué no se aplica el mismo criterio a la custodia compartida que a la única?
Y, por último, si así fuera, ¿qué pasaría con ese 22% de litigios por la custodia, que acaban en el Juzgado?
Basta con aplicar el más puro sentido común.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 8 de junio de 2005