Los pescadores vascos de bajura acordaron ayer iniciar mañana la costera del bonito, tras permanecer casi un mes sin pescar por la ausencia de anchoa en el Golfo de Vizcaya, lo que llevó a la Comisión Europea a decretar el pasado viernes el cierre de esta pesquería a partir del 1 de julio y durante los siguientes seis meses.
Tras la reunión que mantuvieron los representantes de los pescadores de Guipúzcoa y Vizcaya, el presidente de las Cofradías de Guipúzcoa, Jaime Tejedor, expresó ayer su "temor" a que los pescadores franceses adopten "represalias" contra los arrantzales, tras la decisión de Bruselas de impedirles pescar anchoa. Tejedor calificó de "positiva" la prohibición de pescar anchoa en el Cantábrico y se felicitó porque los informes de los científicos, finalmente, han prevalecido sobre los criterios políticos.
La flota del Cantábrico saldrá mañana hacia la costa de Galicia y las Azores a pescar bonito con el condicionante de que no podrán pescar anchoa para utilizarla como cebo vivo, por lo que los arrantzales se muestran preocupados sobre el resultado de la costera.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 12 de junio de 2005