El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se reunió anoche en La Moncloa con los tres españoles que ocupan cargos de responsabilidad en Europa -Javier Solana, Josep Borrell y Joaquín Almunia- para analizar la trascendental cumbre europea que se celebrará a partir del próximo jueves en Bruselas tras el no francés a la Constitución de la UE. El Gobierno quiere hacer valer que España ha sido el primer país en aprobar en referéndum el tratado constitucional y que el proceso de ratificaciones por parte del resto de socios debe continuar.
La cumbre debe abordar otro delicado asunto sobre el que existen aún muchas diferencias: la aprobación del marco financiero -el dinero que cada país aporta o recibe de los presupuestos comunitarios- de la Unión para el periodo 2007-2013. Son las primeras cuentas que hay que cuadrar con una UE integrada por 25 miembros y los países ricos buscan recortar sus aportaciones a costa de los fondos de cohesión, los que benefician más a España.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 12 de junio de 2005