Cuatro policías locales de Mislata se sentaron ayer en el banquillo de los acusados de la sección tercera de la Audiencia de Valencian acusados de un delito de lesiones con agravante de superioridad por fracturar una pierna a un detenido. El fiscal pide para ellos cinco meses de prisión, además de una multa de 1.800 euros y una indemnización a la víctima de 27.690 euros por los días que estuvo impedido y por las secuelas que padece a consecuencia de la agresión.
Según el fiscal, los hechos sucedieron a las 21.00 del 10 de marzo de 2001 en la calle de Regacho en Mislata. Los agentes intentaron detener a la víctima como supuesto autor de un delito contra la seguridad del tráfico pero se negó a introducirse en el coche policial, aunque "sin mostrar violencia o resistencia alguna", pero entre los agentes le cogieron por los brazos, le tiraron al suelo y le colocaron los grilletes. El hombre sufrió fracturas en la rodilla, la tibia y el peroné.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 15 de junio de 2005