El subdelegado del Gobierno en Castellón, Juan María Calles, acusó ayer a la Autoridad Portuaria de esa ciudad de obstaculizar la ampliación de amarres para la celebración de la Copa del América, al haber optado "por el negocio de las marinas privadas" y haber limitado la ampliación del Club Náutico a 200 amarres. Calles hizo estas declaraciones, a través de un comunicado, después de que el presidente de la Autoridad Portuaria de Castellón, Juan José Monzonís, afirmara el pasado lunes que los Presupuestos Generales del Estado 2005 no preveían "ni un solo céntimo" para la Copa del América en Castellón.
Según Calles, el presidente del Club Náutico de Castellón solicitó, junto a los presidentes de los clubes náuticos de Valencia y Gandia, ayudas al Ministerio de Administraciones Públicas para la ampliación de amarres para la celebración de la Copa del América. El relato de la Subdelegación del Gobierno en Castellón asegura que la Autoridad Portuaria castellonense se opuso al proyecto del Club Náutico y organizó durante octubre y noviembre "una fuerte campaña mediática en contra de su ampliación y a favor de crear marinas privadas, lo que implica nuevas concesiones mediante concursos a según que empresas".
Según Calles, la Autoridad Portuaria repartió la dársena interior entre una "pequeña ampliación" de 200 amarres para el Club Náutico y la creación de dos nuevas marinas privadas "de entre 400 y 600 amarres adicionales", que, a juicio del subdelegado, no estarán listos en 2007 cuando se celebre la competición de vela.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 19 de junio de 2005