Si las fiestas se han prolongado en el calendario más de lo previsto, la nit de la cremà anoche también fue lenta y larga. El aluvión de personas que se lanzó a las calles, un millón doscientas mil personas según datos municipales, dificultó las labores de extinción de los bomberos. La primera Foguera en arder fue la instalada en la plaza del Ayuntamiento. Instantes antes una palmera de fuegos artificiales lanzada desde el monte Benacantil, formada por 100 docenas de cohetes, anunció el inicio de la Nit del foc. El perímetro de seguridad se amplió y la cremà oficial quedó limitada, casi en exclusiva, a los medios de comunicación y autoridades políticas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 25 de junio de 2005