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Un consejero sin complejo aldeano

Lo había anunciado y lo hizo. Si el príncipe de Gales no tiene reparo en ponerse faldas cuando está en Escocia, el consejero de Justicia, Seguridad Pública y Relaciones Exteriores del Principado de Asturias, Francisco Javier García Valledor, de IU, estima que no hay razón, sino todo lo contrario, para que los miembros del Gobierno autónomo no puedan vestir el traje típico y folclórico de la Comunidad en determinados actos oficiales. Su primera comparecencia pública de tal guisa fue en un ambiente propicio para ello: una sidrería de Colloto, cerca de Oviedo, donde el Ejecutivo agasajó a los responsables del desfile de San Patricio, en Nueva York, entusiastas preservadores de la tradición irlandesa en EE UU. Aunque la imagen del consejero apeándose del coche oficial enfundado en el traje folclórico de Asturias aparentó cierta ruptura de los procedimientos y protocolos al uso, no es la primera vez que esto ocurre. La catedrática de Filosofía Moral y Política de la Universidad de Oviedo y actual vicepresidenta del patronato del Museo del Prado, Amelia Valcárcel, ya presidió un acto oficial vestida con el traje regional cuando fue consejera de Cultura de Asturias (1993-1995) y algunas autoridades, entre ellas el actual delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín, siendo presidente de Asturias en aquel mismo bienio, se vistieron de vaqueiros, una minoría social ancestral dedicada a la trashumancia del ganado, para recibir los títulos de "vaqueiros de honor" en la braña de Aristébano. García Valledor ha dicho que no pretende convertir el traje típico en un uniforme: "Que se lo ponga el que quiera. Yo creo que en Asturias hay que poner en valor elementos de nuestra cultura. Si en Gales, Jordania y otros muchos sitios se ponen el traje típico en actos oficiales, no hay razón para no hacerlo aquí". A su juicio, quienes lo censuran por ello manifiestan complejo aldeano: "Con el traxe nos sacudimos la galbana provinciana".-

* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 27 de junio de 2005