El Ayuntamiento de Riba-roja ha delegado en un gran número de alegaciones a lo que establezca la Consejería de Territorio y Vivienda, ante la falta de técnicos municipales especializados, por ejemplo, en legislación medioambiental. En cualquier caso, el consistorio condiciona la aprobación del PAI de Porxinos, que deberá volver a pasar por el pleno municipal, a que se subsanen todas las deficiencias reconocidas por el propio Ayuntamiento y los añadidos que considere la consejería. Si el plan no se aprobara, el urbanizador no podrá exigir responsabilidades al Ayuntamiento.
En cuanto al convenio, el Valencia CF se compromete a trasladar su ciudad deportiva a Riba-roja en un plazo de cinco años y a permanecer un mínimo de 20. En el apartado de los compromisos deportivos está que el equipo de fútbol local será colaborador del club valencianista y le prestará sus instalaciones deportivas. La escuela del Valencia CF cederá jugadores de su escuela al Ribarroja CF para que continúen su formación deportiva, y el Valencia jugará un partido anual a partir de la temporada 2006-2007 en las instalaciones del club local. Un elemento que aireó a su favor Francisco Tarazona, en el pleno municipal del pasado sábado, cuando sentenció: "Aquí, todos somos valencianistas".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 27 de junio de 2005