La ruptura en el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Trigueros (Huelva), integrado por PA y PP, culminó ayer en medio de un cruce de acusaciones entre unos y otros. El alcalde, el andalucista Cristóbal Romero, remitió una carta el pasado día 24 a los cuatro ediles del PP con responsabilidad de gobierno, en la que los emplazaba a que abandonaran sus delegaciones, y les puso como fecha límite la de ayer lunes.
El pulso político comenzó cuando los concejales del PP se abstuvieron en la votación del proyecto de presupuestos presentado por el PA. La Corporación de Trigueros, localidad de unos 7.300 vecinos ubicada en la campiña onubense, está integrada por cuatro concejales del PA, el partido más votado en las pasadas elecciones municipales, otros cuatro del PP, tres del PSOE y dos de IU.
El secretario provincial del PP, Jesús Toronjo, acusó ayer al presidente de la Diputación, el socialista José Cejudo, de haber comprado "la voluntad política del PA de Trigueros". Jesús Toronjo aseguró que Cejudo se reunió con Cristóbal Romero días antes de que el alcalde enviara la misiva de cese a los concejales del PP.
Por su parte, el secretario general del PSOE de Huelva, Javier Barrero, indicó que esta crisis se debe a la falta de peso político del PP en la provincia onubense. Barrero incidió en que Pedro Rodríguez, alcalde de Huelva y presidente provincial del PP, "no se ha puesto el mono de trabajo, sino que simplemente se ha colocado bien la corbata para salir bien en la foto y seguir al mando de la agencia inmobiliaria que es su partido en Huelva". El dirigente socialista rehusó pronunciarse ayer sobre un posible pacto de su partido con el PA en Trigueros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 28 de junio de 2005