Los teatros alternativos madrileños han decidido combatir el calor del mes de julio a golpe de drama. Los hay personales, absurdos y hasta cómicos, según la cartelera. En la sala Lagrada (Ercilla, 20), el taller de teatro del mismo nombre interpreta, hoy y mañana (a las 21.00) el montaje La rosa de papel, que retrata las relaciones sociales en una pequeña aldea "donde todos saben lo que hay que saber y callan lo que hay que callar", apunta el director, Miguel Torres. Ya para el mes de julio, la compañía Sinónimo de Lucro pone en escena el espectáculo Sólo desechos (hasta el día 17, de jueves a domingo, a las 21.30), que, según sus tres autores y protagonistas, "es una comedia del absurdo donde personajes solitarios muestran su intimidad con el fin de ser comprendidos, en el marco de unos baños públicos". Este recinto se presta a conversaciones a pie de váter, acumulación de bacterias y miradas furtivas de voyeurs.
Los gérmenes tampoco faltan en la obra Ácaros, que los actores valencianos de Teatro de los Manantiales recrean en la sala El Canto de la Cabra (San Gregorio, 8) hasta el 17 de julio (de miércoles a domingo a las 22.00). Esta pieza, que se incluye en los Veranos de la Villa, define a los ácaros como "seres que pasan desapercibidos pero que llevamos pegados a la piel", aclara el director del montaje, Ximo Flores. Esta reflexión le da pie para idear el drama que nace del enfrentamiento de dos familias: una que se descompone y la otra que no acaba de formarse.
El espectáculo Presas también se decanta por el drama. Sus autores son Ignacio del Moral y Verónica Fernández, que permanecerán con su obra en la cartelera de la sala Triángulo (Zurita, 20) hasta el 31 de julio (de jueves a domingo a las 22.30). Dirigida por Ernesto Caballero, los actores de la compañía La Puerta de Atrás se ponen en la piel de un grupo de mujeres de distinta procedencia "que tratan de sobrevivir al hambre y al frío en una cárcel al norte de España en la década de los cincuenta", resume Caballero.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 28 de junio de 2005