La Federación de Comerciantes del Pescado de Cataluña, que agrupa a 2.000 empresas, anunció ayer que presentará una denuncia ante el Tribunal de la Competencia por el conflicto con las cofradías de Blanes, Palamós, Llancà, Sant Feliu de Guíxols y L'Escala. La entidad busca conseguir "una resolución de Defensa de la Competencia", aseguró su vicepresidente, Leandre Serra. Los comerciantes seguirán sin comprar producto a los pescadores de esas cofradías, que se han agrupado en Giropesca, hasta que dejen de vender a los mayoristas. "Quien ha generado el conflicto debe dar marcha atrás". Serra afirmó que en cuanto "dejen de pretender la comercialización, en tres minutos estaremos comprando pescado".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de julio de 2005