Un estudio realizado por Osalan constata el "abandono" que el sector agrario vasco sufre en prevención de riesgos laborales, con un "gran número" de accidentes al año y una "prácticamente nula" formación en este ámbito. Según este estudio, realizado por Osalan y el Departamento de Agricultura y publicado por la revista Emba, el sector agrario vasco, que el año pasado reunía a 14.068 personas, realiza su trabajo en unas condiciones de "multiplicidad" de riesgos laborales, como son los de tipo físico, químico y biológico.
Estos riesgos alcanzan no sólo a los agricultores, sino también a sus familiares directos, jubilados y a los agricultores a tiempo parcial. La mayoría de las explotaciones no tienen asalariados, son pequeñas y están muy dispersas. De hecho, el 51%de los trabajadores lo hace por cuenta propia. A esto se une que el trabajador, cada vez de mayor edad, realice labores "diversas y complejas", muchas veces en solitario, sin horarios definidos y ambientes adversos. Osalan ha destacado también la temporalidad que caracteriza al sector y el cada vez mayor número de inmigrantes que se dedica a él.
En cuanto a la siniestralidad, 2003 se produjeron 624 accidentes, la gran mayoría leves, aunque también hubo 15 graves y uno mortal. El sector agroganadero fue el más afectado, con 328 accidentes, frente a los 296 del forestal.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 10 de julio de 2005