El alcalde de Ortigueira, Antonio Campo, tuvo oportunidad de encenderse más de un puro este fin de semana para celebrar que el festival de música folk de este recóndito municipio coruñés estrenaba la condición de Fiesta de Interés Internacional, un título que comparte con saraos de las dimensiones de los sanfermines pamplonicas, las fallas de Valencia o los carnavales tinerfeños. Unas 80.000 personas (100.000, a juicio de la policía local) invadieron este pueblecito costero hasta bien entrada la noche del lunes y pudieron asistir a episodios como el concierto de despedida de Os Diplomáticos (de Monte Alto), el grupo que fundara el escritor coruñés Xurxo Souto. La clausura de esta edición número 21 del certamen tampoco se le olvidará jamás al mítico violinista escocés Aly Bain, que rompió una cuerda de su instrumento por primera vez en 32 años sobre los escenarios. "Cuanto más viejo te haces, más fuerte tocas, supongo", comentaba perplejo la pareja artística del acordeonista Phil Cunningham.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 12 de julio de 2005