En los tiempos que corren tenemos uno de los metros donde el diseño y la elegancia está acorde con nuestra ciudad.
En cambio los horarios de cierre y los del fin de semana, dejan mucho que desear...
El mantenimiento de las instalaciones: algunas son verdaderas obras de arte, pueden estar con parte de la iluminación fundida varios meses, las máquinas de fichar los billetes varias semanas estropeadas, y las escaleras automáticas varios días sin funcionar...
No sé qué pasa con el metro de valencia, pero se está dejando y no entiendo por qué.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 16 de julio de 2005