El Grupo Banco Popular ha afinado su maquinaria comercial, dirigida bajo la batuta del dúo formado por el presidente ejecutivo, Ángel Ron, y el consejero delegado, Francisco Fernández Dopico. En los seis primeros meses de 2005 la cartera de clientes de la entidad ha aumentado en 296.000, tras descontar los que ha perdido. El Popular, que dispone de 2.360 oficinas, ha captado 100.000 clientes menos que La Caixa, que tiene 4.856 sucursales. En la actualidad, la cartera de clientes del Popular es de seis millones, de los que más de 500.000 son empresas.
Sin embargo, este esfuerzo comercial le ha pasado factura porque se ha visto obligado a rebajar sus márgenes en la captación del pasivo con los clientes minoristas. De hecho, ahora el banco ha pedido a las oficinas que vigilen los márgenes del negocio.
La entidad obtuvo un beneficio de 424,78 millones en el primer semestre, un 20,1% más, gracias al impulso del negocio, mayores ingresos por comisiones (suben un 9,1%), menores provisiones (caen un 27%) y la contención de costes (crecen un 5,1%). La eficiencia, que refleja lo que gasta el banco por cada cien euros que ingresa) es el 32,7%, un récord en el sistema financiero.
Los créditos son el motor del negocio, con una subida del 24,1%. La entidad no espera que se frene este año. Para financiar el tirón de los préstamos, el banco utilizó parte de la ampliación de capital (792 millones) y los recursos de clientes, que crecieron un 22,4%.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 22 de julio de 2005