La secretaria ejecutiva de Política Social y Bienestar del PP, Ana Pastor, criticó ayer la actuación del ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, en relación con la protección a las víctimas de la violencia de género. "No se puede hacer propaganda cuando hablamos de la seguridad de las mujeres", afirmó. Añadió que el pasado diciembre Caldera anunció la distribución de 20.000 teléfonos móviles para mujeres que tuvieran una orden de protección y alejamiento, "pero, a la hora de la verdad, no se han puesto en servicio más de 500 y los trámites para conseguirlos son lentos y difíciles".
La responsable del PP denunció además las "desigualdades" entre comunidades autónomas, ya que muchas (Navarra, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura, Cantabria, La Rioja, Asturias, Galicia, Aragón, Cauta y Melilla) carecen todavía de juzgados de violencia, a pesar de la cantidad de órdenes de protección que se han dictado en ellas. "El ministro de Trabajo no ha coordinado la actuación entre las comunidades y no ha firmado medidas de actuación directamente con ellas para no perder protagonismo", acusó.
Desde 2001, el número de víctimas de la violencia doméstica se ha incrementado en un 44,68%. Una situación ante la que Pastor afirmó: "Hay que hacer mucho más y hay que tomar medidas para que las mujeres amenazadas estén siempre localizadas".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 25 de julio de 2005