Una mezcla de thriller intimista hilado por una trama de contenido científico sobre manipulación genética en un "mundo asfixiante, frío, vacío y casi deshumanizado". Así describe José Antonio Vitoria su ópera prima, la película Vorvik, protagonizada por Fernando Guillén Cuervo, Amparo Larrañaga y María Valverde. La cinta, que se estrenará el 12 de agosto en las salas de Madrid, cuestiona el uso antiético de la ciencia por parte de los propietarios de laboratorios "para prescindir de enemigos y conseguir poder". Disparos, muertos e intereses de multinacionales hacen que el filme sea "galopante", según Vitoria. Valverde, que hace el papel de Sofía, la heredera de una industria farmacéutica, cuyo padre muere de una forma extraña, dijo ayer que disfrutó con su papel de "mujer fatal". Ella interpreta las secuencias más sensuales junto a Guillén, que hace el rol de un hombre cuarentón "desarraigado y roto".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 4 de agosto de 2005