Acabo de leer en Prensa el anuncio de dos fiestas de rock y dj para los próximos dias 24 y 26 de agosto a celebrar en el cauce del río Turia en el municipio de Riba-roja del cual soy vecino. Lo asombroso del tema es que son fiestas patrocinadas por el Ayuntamiento y cuyo horario de cierre es las 6.00 y las 8.00 de la mañana. Es decir que los vecinos de la zona (amplia zona a causa de los decibelios empleados) estamos obligados a no poder dormir estos días. Entre julio y septiembre se organizan muchas fiestas de este tipo que en principio no tendrían ningún problema si se organizaran en un recinto adecuado o con un horario que tuviera en cuenta a los niños, ancianos, vecinos que trabajan al día siguiente o simplemente personas que, como en mi caso, queremos descansar en nuestra propia casa.
Supongo que el capítulo de fiestas patronales y sus excesos es una de las asignaturas pendientes de nuestro entorno que poco o nada tienen que ver con nuestros países vecinos, un espacio de abuso y falta de respeto elemental al ciudadano. Muchas gracias por publicar mi carta, en mi Ayuntamiento no lo harían.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de agosto de 2005