Miles de personas asistieron ayer en Edimburgo (Escocia), al funeral de Robin Cook, el ex ministro de Exteriores británico fallecido el pasado día 6. Entre los asistentes, de izquierda a derecha: Neil Kinnock, ex líder laborista; David Blankett, ministro de Trabajo; Jack Straw, ministro de Exteriores, y el viceprimer ministro, John Prescott. Tony Blair no asistió por estar de vacaciones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de agosto de 2005