Ni en verano descansan. El último despropósito de ERC no tiene que ver ni con alguna guerra de siglos pasados de la que España deba pedir perdón ni con el asalto a ningún chalet en traje de baño. Esta vez han optado por un delirio lingüístico. Mientras que organizaciones próximas a ERC han lanzado una campaña para que el español deje de ser lengua oficial en Cataluña, Carod y compañía ahora pretenden que el catalán sea lengua oficial en toda España. Es decir, quieren que el catalán sea oficial allí donde no se habla: en Badajoz, Sevilla o Talavera de la Reina, mientras reclaman que el español no sea oficial en Cataluña, donde lo hablamos millones de ciudadanos. En definitiva, otra incongruente y estrafalaria iniciativa de ERC. Suma y sigue...
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 24 de agosto de 2005