El padre de Andreas Grassl, conocido como El Pianista, asegura que su hijo no es un farsante y que, en efecto, toca el piano desde niño. Josef Grassl, de 46 años, lo cuenta en el diario Daily Mirror, el mismo que el lunes acusó al muchacho de haber engañado a los médicos, de haber fingido su enfermedad y de no saber tocar el piano. Sin embargo, esas acusaciones parecen ahora precipitadas. Andreas era un joven apocado al que se le daba bien el francés y que disfrutaba con la música. Aprendió a tocar el piano con 10 años.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de agosto de 2005