Las lluvias de ayer entorpecieron la asamblea de varias decenas de inmigrantes sin papeles, convocada en la rambla del Raval para denunciar las condiciones precarias en la que viven. Los inmigrantes protestaron por la lentidud de los trámites burocráticos para conseguir la documentación que acredita la legalidad de sus contratos laborales y se quejaron de la explotación empresarial. El organizador de la convocatoria animó al grupo a trasladarse a un local en la calle de Joaquín Costa, pero varios de los que acudieron a la cita se quedaron en
las terrazas de la rambla bajo la protección de las sombrillas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 28 de agosto de 2005