Dennis Lynds, popular y prolífico autor estadounidense de novelas negras, falleció el 19 de agosto a los 81 años en un hospital de San Francisco a causa de un fallo multiorgánico provocado por una infección.
Desde hacía un año sufría una grave dolencia gastrointestinal que le llevó al quirófano en varias ocasiones, lo que no le impidió seguir trabajando casi hasta el final. Lo último que escribió fueron dos historias breves para la Ellery Queen's Mystery Magazine.
Autor de más de 80 novelas y 200 relatos, la serie que más fama le dio es la protagonizada por el detective manco Dan Fortune (nacido Fortunowski), que inició su carrera al otro lado de la ley. Fortune estaba saqueando un barco cuando sufrió un accidente que le costó el brazo, lo que le convenció de que esa no era una buena manera de ganarse la vida. Se hizo marino mercante y luego detective privado autodidacta con oficina en Nueva York.
Fortune es heredero de la tradición más dura del género negro estadounidense, el hard-boiled, pero con una singularidad: es un hombre duro, pero lleno de compasión. En los casos que investiga no le importa tanto el qué, el cómo y el cuándo sucedió, sino el por qué sucedió. En consecuencia, sus novelas constituyen un retrato social de las décadas de 1960, 1970 y 1980.
Lynds publicó la saga de Fortune, una veintena de novelas y numerosos relatos, con el seudónimo de Michael Collins. La primera, Act of fear, en 1967 y el último, la antología de relatos Fortune?s world, en 2000. En España han aparecido títulos como Castrato, Muerte azul o El degollador. Fortune ha sido comparado en numerosas ocasiones a Lew Archer, de Ross MacDonald, aunque es menos introspectivo y más humano.
Lynds utilizó numerosos seudónimos. Con el de William Arden publicó una serie de misterio: El misterioso caso de la estatua destructora, El misterio de la casa que encogía, El misterio de los cristales rotos o El misterio del lago fantasma. Otros nombres de los que se sirvió fueron Maxwell Grant, Nick Carter, John Crowe, Carl Dekker y Mark Sadler.
Con su propio nombre escribió su primer libro, Combat soldier (1962), sobre su experiencia en la Segunda Guerra Mundial, en la que obtuvo la medalla púrpura.
Nacido en Saint Louis en 1924, creció en Nueva York, donde estudió Química y Periodismo. Vivía en Santa Bárbara (California) y sus amigos afirman que era un hombre bueno y generoso con sus jóvenes colegas.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 7 de septiembre de 2005