El apodo de Imad Eddin Barakat Yarkas también surge en todas las investigaciones sobre terrorismo islámico en Madrid. De hecho, algunos investigadores policiales lo han llegado a calificar de cerebro del 11-M. Natural de Alepo (Siria), hijo de un general del ejército, se afilió de joven al movimiento Hermanos Musulmanes, está pendiente de sentencia como supuesto jefe de Al Qaeda en España y por su presunta relación con el 11-S. El fiscal pide para él 74.000 años de prisión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 7 de septiembre de 2005