Los grupos parlamentarios no lograron ponerse de acuerdo ayer ni siquiera en el número de comisiones que deberán funcionar esta legislatura en la Cámara vasca, en la primera reunión de su Junta de Portavoces, que se esperaba que resolviera al menos oficiosamente esa cuestión, aunque no estaba en su orden del día. Era el primer paso para hablar después de cuántos diputados integrarán cada una y de cómo repartir sus presidencias entre los grupos del Gobierno y los de la oposición.
Con esa discrepancia básica, los grupos se han dado una semana para incorporar el asunto a su próxima reunión. EHAK y el PP fueron los más críticos con la situación de la Cámara, El portavoz popular, Leopoldo Barreda, consideró "grave" y "anormal" que no exista aún un calendario para la formación de los órganos parlamentarios.
Barreda desveló que existía un compromiso para tener constituidas las comisiones en la primera quincena de septiembre y dijo que ya no va a poder cumplirse. A su juicio, la "ralentización" del arranque del trabajo en la Cámara -"no hay posibilidad de trabajar", denunció- es deliberada y debida a las dificultades que el Gobierno prevé que va a tener por su situación de minoría. "Está dilatando indefinidamente su comparecencia y la rendición de cuentas", acusó el diputado popular.
La Mesa sí acordó abrir el plazo de veinte días para proponer los senadores autonomicos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 7 de septiembre de 2005