Con media hora de retraso comenzó ayer la única sesión en concierto de la ópera Mitridate, Re di Ponto, de Mozart, que interpretaron ayer Marc Minkowski y su orquesta de Les Musiciens du Louvre, con Richard Croft, Netta Or o Gilliam Webster en el reparto. La ubicación de la orquesta y los cantantes en la escena, adelantados y colocados justo donde se encuentra el foso habitualmente delante del escenario y que ayer estaba cubierto, provocó las iras de los que tenían entrada en las zonas superiores por la escasa visión, informa J. Á. Vela del Campo. Ante las protestas de un sector del público -que gritaba cosas como "¡Timo!", "¡Estafa!"...- el director general del teatro, Miguel Muñiz, salió a pedir disculpas y a ofrecer a quien lo deseara el canje de las entradas por dinero.
Después del anuncio, más de 100 personas se agolparon ante las taquillas con indignación palpable y el concierto se reanudó a las 20.30. Muñiz aseguró en el intermedio de la función, que una vez comenzada se desarrolló con toda normalidad, que la posición de la orquesta está condicionada en este tipo de funciones por razones de seguridad, pero que se debía haber indicado. "Efectivamente quienes protestaron tienen razón y se pondrán los medios para que no vuelva a ocurrir nada parecido", dijo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 11 de septiembre de 2005