Este año se ha cambiado el sistema de acceso a las actividades de libre configuración, se ha abolido la preinscrip-ción, en la que prevalecían los créditos que quedaban para terminar la carrera y la nota, y se ha pasado al sistema de "el que primero llegue, se lo queda". La matrícula hay que hacerla vía web mediante la herramienta "Automatrícula", que se encuentra saturada, debido a la avalancha de alumnos que hemos intentando reservar nuestras plazas antes de que nos las quiten. El plazo comenzó el 1 de septiembre. A día de hoy, a pesar de haberlo intentado todos los días varias veces a varias horas diferentes, no he podido reservar nada, todo ello en medio de los exámenes de septiembre. Por si no fuera suficiente, en el proceso de "Automatrícula", se han producidos graves errores. El más importante de ellos es uno que afecta a la confidencialidad de los datos; así, por ejemplo, cuando un alumno tenía la suerte de poder acceder a la aplicación, se le mostraban todos los datos personales (incluyendo cuenta bancaria) de otro alumno distinto. Creo que esto atenta claramente contra la ley de confidencialidad de datos. Escribo este mensaje para que el calvario que estamos pasando muchos estudiantes de la Universidad de Sevilla no quede en silencio. Un saludo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de septiembre de 2005