El organismo regulador de las comunicaciones en el Reino Unido, Ofcom, ha prohibido una campaña de televisión en contra de la pobreza, y que utiliza a famosos como los actores Brad Pitt o Emma Thomson o la modelo Kate Moss para hacer llegar mejor su mensaje. El organismo británico ha denegado permiso para la difusión de publicidad en el marco de la campaña Make Poverty History (Relegad la Pobreza a la Historia) por considerar sus objetivos básicamente políticos. La ley prohíbe difundir por radio o televisión anuncios políticos o relacionados con organismos que tengan objetivos de ese tipo. Para justificar la prohibición, Ofcom cita el manifiesto de la campaña, en el que se pide al Gobierno británico que cambie su política en tres áreas estrechamente vinculadas entre sí: el comercio, la deuda y la ayuda al desarrollo. El manifiesto insta al Gobierno a poner fin a los subsidios a la exportación que ponen en peligro los medios de subsistencia de las comunidades pobres de todo el mundo y a promulgar leyes que impidan que las grandes empresas obtengan pingües beneficios a costa de las personas y el medio ambiente. La ley británica sobre comunicaciones, de 2003, califica de "objetivos políticos" el hecho de hacer campaña a favor de que se cambien las leyes o de influir en la política del Gobierno de Londres o de gobiernos extranjeros. Los miembros de la coalición, integrada por cerca de trescientas organizaciones benéficas, entre ellas algunas tan conocidas como Oxfam, han protestado contra la decisión.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de septiembre de 2005