El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, anunció ayer que proyecta una "ordenanza antivandálica" con el objetivo de "endurecer" las multas y "agilizar" los procedimientos administrativos contra los autores de daños contra el mobiliario público. El regidor admitió que existe una "cierta sensación de impunidad" para quienes cometen estos actos vandálicos.
Esta iniciativa fue impulsada en la pasada legislatura aunque no llegó a concretarse porque, según el alcalde, "el marco jurídico no nos permitió avanzar más". La norma, sin embargo, podría recibir ahora un nuevo impulso "gracias a un conjunto de modificaciones legales ocurridas en los últimos meses", aclaró.
En una rueda de prensa tras la firma de un convenio de colaboración con la organización Movimiento contra la Intolerancia, el alcalde de Sevilla anunció también que la ciudad recibirá 69 nuevos efectivos del Cuerpo Nacional de Policía, de los cuales 40 estarán adscritos a labores de seguridad ciudadana.
Sánchez Monteseirín dijo que estos agentes se dedicará a "unas funciones que no estaban bien cubiertas" y "liberará a agentes de la Policía Local para dedicarse a otro tipo de situaciones que si no son delitos, son faltas", en relación a casos de "vandalismo".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de septiembre de 2005