El cuadro más luminoso de la exposición refleja a una niña comiendo casi a oscuras, iluminada por un farol. El resto de cuadros que forman la exposición Pesimismo naïf terminan de contar una historia de abatimiento humano que Liz Lobato empezó a contar hace dos años y acaba de colgar en la sala La Boca, en Lavapiés.
La tristeza, la rabia, la voracidad, ira e hipocresía son algunos de los contenidos de los 18 cuadros con los cuales esta actriz, filósofa y pintora toledana explica su reflexión de "no somos nadie". También establece un paralelismo entre los humanos y los lemmings, esos roedores que las leyendas han puesto como protagonistas de enormes suicidios colectivos.
"Empiezo con un cuadro de lemmings, que no es que se suicidan en masa, si no que huyen por hambrunas y no logran superar los obstáculos. Desorientados, terminan cayendo al mar", explica la pintora. La exposición permaneceráen La Boca (Argumosa, 11) hasta el próximo 29 de septiembre, mostrando lo que Lobato llama su propia "indignación meticulosamente pensada".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 16 de septiembre de 2005