El curso empieza sin profesores. Es indignante que al mismo tiempo que Esperanza Aguirre presenta a la Comunidad como fantástica y maravillosa, mi hijo de siete años se encuentre aún sin profesora. A los padres nos "quitan" la patria potestad en el horario lectivo (pues no olvidemos que la educación a esa edad es obligatoria) y sin embargo, nadie se ocupa de que nuestros hijos tengan una persona responsable de ellos en esa franja horaria.
Nuestro colegio de línea uno, es decir, solo tiene nueve aulas (una por curso), empezó el día 12 de septiembre con menos cuatro profesores, y hoy, cuatro días después, lejos de mejorar, empeoramos: la Consejería de Educación no envía a nadie, pero sí concede un traslado y una profesora se va del cole: ¡genial! Ahora nos quedamos con menos cinco. De nueve tutores que se necesitan, el 15 de septiembre nos faltan cinco. ¿Alguno de los muchos cargos que hay en Educación entiende que la responsabilidad de que los niños estén sin profesor es suya.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 17 de septiembre de 2005