Juliano II, conocido por el mote de El Apóstata que le endosaron sus enemigos, los cristianos, es uno de los emperadores romanos que, como Claudio, Nerón, Calígula, Adriano o Marco Aurelio, mayor popularidad han obtenido gracias a la ficción. Obstinado en devolver el Imperio al paganismo y recuperar con ello el antiguo esplendor de Roma, Juliano protagoniza esta gran novela de Gore Vidal. Reflexión y acción se combinan espléndidamente en el relato que sigue la vida del emperador, filósofo y militar cuyo destino fue combatir al enemigo persa y perecer herido por una jabalina arrojada desde sus propias filas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 18 de septiembre de 2005