Resulta curioso que la inmensa mayoría de los bilbaínos tengamos que presentar diversos papeles y certificados para obtener la tarjeta que nos permite aparcar en la calle donde vivimos bajo pago de la OTA y que, sin embargo, las comparsas puedan seguir aparcando sus txosnas, a pesar de que la mayoría de ellas no presentó el año pasado la documentación que les es exigida. También es llamativo que, para evitar la competencia desleal a los comerciantes, no se permita a los vendedores ambulantes tener sus tenderetes si no pagan los impuestos correspondientes, mientras que los txosneros sí pueden hacer esa competencia a los hosteleros.- Jesús Sanz. Bilbao
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 20 de septiembre de 2005