La actual denominación "plaza de toros" para referirse y distinguir al lugar donde se llevan a cabo las llamadas "corridas de toros", no es la adecuada ya que este espectáculo no es ni más ni menos que una cruel muerte a plazos y su nombre induce a confusión por parte de aquellos que no han asistido nunca y no saben con lo que se van a encontrar. Resulta evidente que estas "corridas", por su alto índice de brutalidad y salvajismo, pueden herir gravemente la sensibilidad del sorprendido espectador.
La denominación del producto que se publicita o vende, falsea la realidad y puede considerarse publicidad engañosa. Por eso solicito que en el próximo Pleno que celebre la Corporación Municipal se proponga el cambio de denominación de la Plaza de Toros de Benidorm, existiendo dos alternativas para este cambio: 1) Plaza de Sacrificios; o 2) Plaza de Torturas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 23 de septiembre de 2005