El pacto para desbloquear la gestión de los residuos firmado en julio por el presidente del Consell, Francisco Camps, y el secretario general del PSPV-PSOE, Joan Ignasi Pla, topa con dificultades. La participación de la Generalitat en una propuesta empresarial para construir una incineradora de basuras en La Vall d'Alba, y los problemas de la constitución de uno de los consorcios de municipios que deberán adjudicar nuevas instalaciones llevaron ayer al secretario de Medio Ambiente del PSPV, Francesc Signes, a lanzar una clara advertencia al PP. Si el consejero de Territorio y Vivienda, Rafael Blasco, "no cumple con el acuerdo", los socialistas se desvincularán del mismo.
Signes criticó que la decisión de impulsar una incineradora supone una "imposición unilateral" de la consejería, mientras que en el caso del consorcio en el que debe integrarse la Vall d'Albaida, el PP no ha mostrado voluntad de dar salida a la situación de la Mancomunitat, que ya gestiona los residuos de los municipios que la integran. "Tensan la situación para que rompamos el pacto", aseguró Signes, quien añadió que hace ya 15 días que los socialistas designaron a sus representantes en la comisión de seguimiento del pacto sin que hayan recibido respuesta de la consejería.
El director general de Calidad Ambiental, Jorge Lamparero, afirmó que "el pacto está más vigente que nunca" y cuenta con el apoyo de muchos Ayuntamientos socialistas. Lamparero defendió que el pacto no excluye tecnologías de valorización energética como las incineradoras. El director general aseguró que los estatutos del consorcio en el que debe integrarse la Vall d'Albaida "están abiertos a la modificación" y afirmó que los socialistas "no quieren entrar".
También en relación con los residuos, los Ayuntamientos socialistas de la entidad metropolitana de residuos (Emtre) de Valencia han decidido apoyar una tasa para el tratamiento y eliminación de las basuras. No obstante, el PSPV quiere introducir "correcciones" en la propuesta que negocia con el PP, relacionadas con las posibilidades de bonificación y medidas para evitar un coste excesivo a las familias de rentas bajas. Signes afirmó que este apoyo "demuestra la predisposición a colaborar con el PP".
La tasa la cobrará el Emtre, que integra a Valencia y 43 poblaciones del área metropolitana. La entidad creada por el PP nació lastrada por el déficit del extinto Consell Metropolità de L'Horta y el cobro del servicio precisa de una clarificación administrativa, ya que hay Ayuntamientos que se han avanzado y tienen tasa de basuras, destaca José Ruiz, portavoz socialista en el Emtre.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 23 de septiembre de 2005