El ex tequila y ex rodríguez Ariel Rot (Buenos Aires, 1960) publica en estos días su séptimo trabajo en solitario, titulado Ahora piden tu cabeza. Para el autor de Necesito un trago o Hace calor, en este álbum "hay mucho amor: amores que duran para siempre, lolitas destrozamatrimonios, amores a la soledad, como en Dulce y solitario. Hay relaciones turbulentas o frustradas".
Grabado entre mayo y junio de este año en Madrid, prácticamente en directo junto a los cuatro músicos de su banda, el álbum recoge historias sentimentales entre las que abundan fieles retratos de gloriosos perdedores. Por ejemplo, los que habitan canciones como la extraordinaria Muñecas rotas, que seguro firmaría gustoso el mismo Joaquín Sabina, o la irónica Swing.
En cuanto a la primera, Ariel cuenta: "Para esa canción tomé muchas referencias, tanto masculinas como femeninas. Es un personaje rápidamente reconocible en cuanto a estilo". Sobre la segunda, Rot confiesa: "Trata de un personaje muy literario, desastroso y perdedor. La letra es de Sergio Makaroff".
Acerca del tema que abre y da título al álbum, Ahora piden tu cabeza, Ariel explica que "es como La hoguera de las vanidades, ese momento cumbre siempre al borde del precipicio. En realidad, va sobre la fiesta española contada por unos especialistas como nosotros, que año a año conocemos de primera mano el backstage de esa fiesta española que necesita siempre de un poco de crueldad para ser completa".
Ariel Rot, que acaba de ser padre por segunda vez y afirma que ahora le importa más "la vida que el arte" -"y eso me da un enfoque distinto a la hora de hacer discos"-, observa el rock en la actualidad con "el patetismo del rey destronado. Viviéndolo desde el lado de la ofensa lo puedes pasar mal. Lo que sí que no va a recuperar ya más el rock es la capacidad de trascender lo musical, cosa que sucedió en su época dorada, cuando dio los mejores discos de la historia".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 23 de septiembre de 2005