Juan Alberto Belloch, enseña la maqueta de las instalaciones de la Expo 2008 expuesta en Aichi / EFE
Los japoneses, locos por las tapas
Un buñuelo con crema de bacalao, un irlandés con lentejas o un bocadillo ibérico al revés, en el que el jamón envuelve una finísima, diminuta y crujiente barra de pan. Esto es parte del éxito y el reclamo al que han acudido ya más de 250.000 visitantes de la exposición de Aichi.