La comisión provincial del Agua se constituyó ayer con buen pie y buena predisposición por parte del PP y PSPV, que pretenden determinar en un informe las necesidades hídricas de las comarcas del sur. Los socialistas dieron un voto de confianza al sector que defiende los trasvases como única solución y preguntaron sobre la reducción de las ayudas que destina el Consell para la mejora de las infraestructuras hídricas.
Antonio Amorós, portavoz del PSPV, cifró en un 20% la reducción de las aportaciones del Consell a la Diputación en materia hídrica el año pasado, y en este ejercicio en un 15% menos. En total 3,6 millones de euros que la Generalitat tenía previsto destinar a Alicante se han perdido, según los socialistas. Para Amorós esta situación es fruto de "las malas relaciones entre Camps y Zaplana". Los socialistas esperan que esta comisión no se convierta en "la trinchera del PP y se alcance el consenso".
La Comisión del Agua, constituida hoy por representantes de la Administración y de diferentes organizaciones empresariales, hidrográficas y agrarias, elaborará un informe para determinar las necesidades hídricas de la provincia, entre otras actuaciones. El presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, del PP, anunció que en las primeras reuniones abordarán de forma "prioritaria y urgente" la situación de los trasvases Júcar-Vinalopó y Tajo-Segura, así como las consecuencias que tendrán el desarrollo del Plan AGUA, de la ministra Narbona, y las modificaciones del Plan Hidrológico Nacional. La Comisión del Agua está integrada por 44 miembros, entre los que se encuentran representantes de la Diputación, de la Generalitat y de los municipios de la provincia, así como expertos en la materia, regantes y responsables del sector empresarial, de las confederaciones hidrográficas y de las asociaciones agrarias.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de septiembre de 2005