En estos momentos llevo 1 hora y 15 minutos atrapado en la Castellana para recorrer un trayecto que normalmente no me lleva más allá de 15 minutos, gracias a que el alcalde -supongo que para facilitar nuestro éxito en unas Olimpiadas que no nos han concedido- ha decidido que se celebren en Madrid los Mundiales de Ciclismo. Y para eso no ha tenido mejor idea que cerrar en un día laborable el paseo de la Castellana, que es la principal vía de acceso a la ciudad desde el norte de Madrid, eso sí, sin avisar a los ciudadanos, para facilitar que queden atrapados en un atasco descomunal.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de septiembre de 2005