El consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, anunció ayer que el Gobierno andaluz mantendrá una posición "firme y decidida" en contra del sistema de financiación "unilateral" contemplado en la proposición de ley de reforma del Estatuto de Cataluña. Zarrías dijo que la Junta "está convencida" de que el Estatuto "no llegará hasta el final" y se mostró confiado en que las Cortes "jueguen el papel que les corresponde".
Gaspar Zarrías sigue la estela del presidente andaluz, Manuel Chaves, que el viernes, en Córdoba, mostró su desacuerdo con la proposición de ley del Estatuto catalán y confió en que el Congreso garantice la cohesión territorial. El consejero de la Presidencia abandonó ayer la prudencia mostrada por Chaves el día anterior y anunció la posición "firme y decidida" del Ejecutivo autonómico en contra del Estatuto catalán.
El consejero se refería al sistema de financiación contemplado en la reforma del Estatuto catalán, que calificó como "unilateral". "Algo que afecte a todos tiene que ser aprobado, estudiado y debatido por todos y, evidentemente, hasta ahora eso no ha sido así".
El número dos del Gobierno andaluz aseveró que ése será, pues, el papel que quiere jugar Andalucía, aunque "sin ningún tipo de dramatismo". Y añadió: "Nuestro país es lo suficientemente maduro para que en ningún caso las cosas se hagan bordeando por fuera la Constitución". Por eso se mostró confiado en que las Cortes "jugarán el papel que les corresponde" y "cambiará y reformarán todo lo que no se ajuste a la Constitución". Zarrías no fue tan explícito, sin embargo, cuando dijo que hay "algunos" apartados más, recogidos en el título que regula las competencias entre la comunidad y el Estado, que "están fuera de la Constitución", apartados que no llegó a enumerar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 2 de octubre de 2005