Un penalti hizo virar por completo el sentido del encuentro. El Zaragoza, a base de ahogar al Barça con las líneas bien compactas y evitando dejar huecos, se adueñó del partido. Y lo hizo suyo hasta tal punto que, a falta de poco más de un cuarto de hora para la conclusión, ganaba por dos goles a cero en casa del actual campeón de Liga. Pero un balón colgado al área a la desesperada llegó a los pies de Van Bommel, que, tras un control orientado un poco largo, perdió la posición ante Delio Toledo. Así, el holandés, que no pudo controlar el esférico por la presencia del lateral, soltó la pierna para disparar. Y el colegiado señaló penalti al considerar que el defensa, en vez de despejarlo, topó con la fornida pierna del futbolista de pelo rizado. Mientras Toledo enfilaba el túnel de vestuarios, Deco se acercó para consolarle: "Tranquilo, este árbitro es muy malo". Y hasta Van Bommel, al final, confesó: "No sé si es penalti, pero me dio un poquito en el gemelo".
"En mi vida me habían pitado un penalti así. Sólo lo vio el árbitro, Megía Dávila", espetó Toledo con cara de decepción. Y añadió: "Espero que el club recurra contra la segunda tarjeta amarilla [en caso contrario, Toledo será sancionado para el próximo partido de Liga, contra la Real Sociedad], pero poco importa porque los dos puntos ya nos los han quitado". En el mismo sentido se expresó Álvaro, que vio la jugada de cerca: "Fue un choque natural. Esto en otro campo no lo pitan. Pero el árbitro tenía mucha presión". Y agregó: "No quiero decir que el árbitro es malo, porque tampoco me gustaría que me dijera que soy un mal jugador. Pero espero que vea la jugada y el próximo día esté más concentrado". Ronaldinho, finalmente, transformó el penalti y el Barça se metió en el partido. "Con 10 hombres es muy complicado, duro, jugar con el Barça. El penalti ha sido un error y, sin duda, ha condicionado la marcha del partido", apostilló Víctor Muñoz, el entrenador. César, el portero del Zaragoza, también opinó sobre la polémica jugada: "Esa decisión, que desde luego no era penalti, nos ha perjudicado demasiado". Pero Van Bommel, pragmático, recordó: "El árbitro es el que decide sobre el terreno de juego, y lo pitado, pitado está."
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 2 de octubre de 2005