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Otegi dice que la oferta de Anoeta sigue vigente

Miles de personas secundan en Bilbao una manifestación apoyada por Batasuna

El dirigente de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi, dijo ayer en Bilbao que la propuesta de Anoeta para abrir un proceso de paz en el País Vasco sigue vigente. La iniciativa de Anoeta, presentada en noviembre del pasado año, propuso una doble vía de negociación: una mesa de partidos para lograr acuerdos políticos y un diálogo entre ETA y el Gobierno para tratar sobre los presos y el abandono de las armas. La propuesta de Anoeta fue avalada por la banda dos meses después.

Otegi cerró ayer con una intervención pública una manifestación convocada con el lema Orain berria, orain bakea (Ahora el pueblo, ahora la paz) por José Ramón Etxebarria, ex portavoz de AuB, la plataforma de la izquierda abertzale anulada en las municipales de 2003. Días antes de la manifestación, Batasuna hizo explícito su apoyo a la convocatoria con carteles en las calles del País Vasco.

El mismo lema fue utilizado por Batasuna para convocar otras dos manifestaciones el pasado mes de agosto, una prohibida en San Sebastián y otra que no fue vetada en Bilbao. Más de 5.000 personas participaron ayer en la manifestación, que recorrió las calles del centro de Bilbao bajo la lluvia tras una pancarta en la que se pedían "derechos civiles y políticos".

Otegi volvió a incidir en que no está abierto un proceso de paz. A esta idea, repetida en las últimas semanas, añadió que Batasuna no reconocerá que el proceso está en marcha hasta que no existan "los compromisos y las garantías suficientes". El portavoz de Batasuna también lanzó un mensaje al PNV, al que pidió que no anteponga sus intereses a "la solución del conflicto".

Por otra parte, Batasuna anunció ayer que había remitido una carta abierta a los participantes en el I Foro Parlamentario Iberoamericano, que ayer se clausuró en Bilbao. En el documento señalaron que "la tarea prioritaria" para el pueblo vasco es "construir la paz".

* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 2 de octubre de 2005