La celebración de la patrona de la Guardia Civil en Valencia, en el patio del acuartelamiento situado en el barrio de Patraix, tuvo ayer un nombre propio: el de Tomás Catalá. Su hermano recogió la cruz al mérito con distintivo rojo. El agente Tomás Catalá murió en septiembre del pasado año en acto servicio, en un tiroteo en Sueca. También sus compañeros en aquel servicio fueron distinguidos. El delegado del Gobierno, Antoni Bernabé, no sólo reconoció los méritos de los especialmente homenajeados sino que resaltó "el excelente trabajo que realiza la Guardia Civil en favor de todos los ciudadanos".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de octubre de 2005